TSH 07.08.24
Antes que nada, esto fue lo que sonó:
No existe el infinito: el infinito es la sorpresa de los límites. Alguien constata su impotencia y luego la prolonga más allá de la imagen, en la idea, y nace el infinito. El infinito es el dolor de la razón que asalta nuestro cuerpo. No existe el infinito, pero sí el instante: abierto, atemporal, intenso, dilatado, sólido; en él un gesto se hace eterno. Un gesto es un trayecto y una trayectoria, un estuario, un delta de cuerpos que confluyen, más que trayecto un punto, un estallido, un gesto no es inicio ni término de nada, no hay voluntad en el gesto, sino impacto; un gesto no se hace: acontece. Y cuando algo acontece no hay escapatoria: toda mirada tiene lugar en el destello, toda voz es un signo, toda palabra forma parte del mismo texto —Chantal Maillard, “No existe el infinito”.
Las posibilidades de las listas son enormes. No es solo el asunto jerárquico, tal vez el menos interesante de sus atributos. Las listas pueden, además de poner en orden de importancia una serie de cosas, ser instrumentos de memoria. ¿El listado de todas las páginas web que uno vio hoy? ¿La lista de los memes, reels, videos que uno envió? Muchas de estas se compilan fuera de nuestra conciencia, al margen de nosotros, precisas y codificadas, estandarizadas y circunscritas a las herramientas que utilizamos a diario. Confeccionar las propias, con la posibilidad de imprecisión y franco error, es hacernos concientes de nuestro transcurrir. Las listas que componemos son variantes del diario personal.
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Hace ya más de treinta años, A.S. Byatt escribió en el New York Times un ensayo sobre hacer listas. Y en él da una definición de las listas que me gusta particularmente:
Lists are provisional and incomplete, fleeting and frivolous, useful and enticing.
Y más adelante:
All listmakers enjoy the misery of indignation about the omitted essentials.
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La técnica de llevar una lista también es importante. Las hay improvisadas, frágiles, desperdigadas en varias hojas de papel de tamaños distintos. Existe el cuaderno para listas. Las listas que se albergan en alguna aplicación del teléfono. Hay también quien recurre a la hoja de cálculo para darle forma a esta obsesión. El ejercicio no podría ser más distinto en cada uno de los casos. ¿Cómo llevan las suyas? ¿Cuáles son?
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Julio Ramón Ribeyro numeró sus Prosas apátridas. La 97 dice lo siguiente:
Somos un instrumento dotado de muchas cuerdas pero generalmente nos morimos sin que hayan sido pulsadas todas. Así, nunca sabremos qué música era la que guardábamos Nos Faltó el amor, la amistad, el viaje, el libro, la ciudad capaz de hacer vibrar la polifonía en nosotros oculta. Dimos siempre la misma nota.
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En el Occidente medieval, el tiempo se estructuraba principalmente como decía la iglesia. Como casi todo en la vida. Eran ocho las horas canónicas. Y algunas de ellas vienen de la antigüedad romana. Por ejemplo las horas nona, sexta y tercia. La sexta, cerca de las 12 del día, era la hora a la que era costumbre echar un coyotito.
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[W]e tend to forget that until recently most literary masterpieces were designed as popular entertainment. From Rabelais, Shakespeare and Molière in the classical age, down to the literary giants of the nineteenth century—Balzac, Dumas, Hugo, Dickens, Thackeray—the main concern of the great literary creators was not so much to win the approval of the sophisticated connoisseurs (which, after all, is still a relatively easy trick) as to touch the man in the street, to make him laugh, to make him cry, which is a much more difficult task.
Esto escribió Simon Leys, pseudónimo del belga Pierre Ryckmans, en un ensayo dedicado al Quijote.
Además, leímos un ensayo fascinante de Rosario Castellanos sobre Sor Juana. Uno que sirve como punto de partida para entrarle a la obra de la poeta. Se llama “Asedio a Sor Juana”. Y así comienza:
Una nueva entrega del ÍndiceTSH, un homenaje-plagio del famoso índice de la revista Harper’s: datos duros para preguntas urgentes.
El 31% de ustedes dicen que hacen hasta 30 minutos de traslado desde su hogar hasta su lugar de trabajo.
El 30% de ustedes dicen que hacen entre media y una horade traslado desde su hogar hasta su lugar de trabajo.
El 15% de ustedes dicen que hacen más de una hora de traslado desde su hogar hasta su lugar de trabajo.
El 23% de ustedes que no tienen tiempos de traslado porque siempre trabajan desde casa.
Inauguramos una nueva columna, intitulada Tres cosas halladas al fondo de la mochila1, una celebración de las vaguedades que van dando forma a la curiosidad y que sirven como punto de partida para observar el mundo.
El dato: Hay 2,598,960 distintas manos posibles en el poker jugado con una baraja de 52 cartas.
El objeto: La grilla de Cardano. Una técnica de encriptación popularizada por el matemático Girolamo Cardano, pero empleada desde hacía mucho tiempo atrás en China y en la antigua Grecia. Se emplea una cartulina con perforaciones estratégicas que, al superponerse sobre un texto, destaca las letras específicas que componen el mensaje cifrado.
El personaje: Yamanaka Yukimori
Una nueva entrega del Milenario e Infalible Zodiaco de la Desgana. Se trata de un formato simplificado, de seis signos agrupados según cada dos meses calendario ahora, como servicio a la comunidad, aquí la frase que según los arcanos de este Milenario e Infalible Zodiaco de la Desgana, influirá o calificará lo que resta de su semana:
Me encantan las ruinas porque logran hacer lo único a lo que todo lo demás aspira eternamente: regresar a la tierra, fundirse de nuevo con el paisaje.
La madera siempre se trabajaba en verde, cuando estaba inmadura y era más fácil de cortar, barrenar o darle forma a las junturas.
Al cerrar los ojos, vi las profundidades ocultas del bosque: el mundo de las raíces.
El ciclismo —una vez que se supera la fase de aprendizaje, es decir, la etapa “acrobática” o “de equilibrio”—, en sentido estricto, requiere muy poco esfuerzo.
Pues bien, hay que decir que un simple soplo de aire fresco aliviaría de un plumazo semejantes dolencias.
Todas tendremos que enfrentarnos tarde o temprano a una excursión pasada por agua, y en tanto la ciclista vaya ataviada con prendas de lana y siga moviéndose, no habrá ningún peligro de que pille un resfriado.
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Para esta edición del Milenario e Infalible Zodiaco de la Desgana, se consultaron a dos arcanos: Roger Deakin y F.J. Erskine
Y sí, el título se asemeja al de aquel famoso ensayo. Qué se le va a hacer.
Me sentí muy bien de no ser "La loca" de las listas que muchas veces me hacen sentir mas bien, Tonta.
Tengo Listas (ó tontas) de: Super, pagos (deudas), libros (por leer), música (por buscar), cumpleaños (por si amerita regalito), series o peliculas (por ver). Y del trabajo otras mas...