Antes que nada, la lista de canciones.
Ciertos pescadores sacaron del fondo una botella. Había en la botella un papel, y en el papel estas palabras: “¡Socorro!, estoy aquí. El océano me arrojó a una isla desierta. Estoy en la orilla y espero ayuda. ¡Dense prisa. Estoy aquí!”
–No tiene fecha. Seguramente es ya demasiado tarde. La botella pudo haber flotado mucho tiempo, dijo el pescador primero.
–Y el lugar no está indicado. Ni siquiera se sabe en qué océano, dijo el pescador segundo.
–Ni demasiado tarde ni demasiado lejos. La isla Aquí está en todos lados, dijo el pescador tercro.
El ambiente se volvió incómodo, cayó el silencio. Las verdades generales tienen ese problema.
Wislawa Szymborska, “Parábola”
Este fue el reportaje que comentamos. “La revuelta de los repartidores”, de Josh Dzieza y traducido por Elena Vega para Curbed.
*Por favor, rolen los reportajes, testimonios y demás sobre repartidores y trabajos precarizados.*
En este programa descreemos de la nación y de la patria. Pero creemos en el lenguaje como un lugar. Y eso es problemático. Y ya seguiremos hablando más de eso. O tal vez siempre estamos hablando de eso. Del lugar que es el lenguaje y del lenguaje que, entre muchas otras cosas, también es un lugar problemático.
Julio Ramón Ribeyro, Prosas apátridas
Una nueva entrega de la columna de opinión semanal: “Por eso, pero ¿cómo?”, la serie de consejos no solicitados para problemas cotidianos.
Por eso, pero ¿cómo saber si es un momento propicio para leer?
La luz, la caída de la luz, el modo en el que la luz golpea la página; revisar.
El aroma, los olores circundantes, las pequeñas brisas de perfume, fritanga, elixires que recuerdan ratos tristes y detonan distracciones; anticipar.
Hambre, sed, sueño, ansiedad sexual, comezones, mal sabor de boca, calcetines masticados por el pie dentro del zapato; resolver.
Instrumental para anotar, borrar, corregir; conseguir.
Llamadas urgentes; solventar.
Pendientes menores, saludos de familiares, súbitos recuerdos de tareas no realizadas; ignorar.
Familia, amigos, gente querida pero desconocida; posponer.
Desconocidos ofreciendo conversación, productos, solicitando transacciones comerciales, solicitando atención, solicitando dinero, solicitando el pago por servicios realizados; evaluar.
Conciencia culposa, monólogo interior cruel, voces en la mente juzgonas; pelear.
Dudas; dejarlo para otro momento.
Y una entrega más de la sección intitulada,
Qué solazo el aguacero, dedicada a reportar el clima de los próximos siete días en algún punto específico del planeta que compartimos.
En esta semana: Paka, en Malasia
Jueves: 31/24. Tormentas aisladas. No se deje impresionar por los nubarrones, como tampoco por las bravuconadas de la vida. Va llover, pero eso qué.
Viernes: 30/24. Tormentas en pleno. Bueno, quizá hoy sí amilane un poco la altanería, porque los charcos de ayer son el bochorno de hoy. Y solo van a crecer los charcos.
Sábado: 31/24. Tormentas por la tarde. La sensación de humedad será un infierno y los charcos no se disipan. Mejor guárdese junto al ventilador.
Domingo: 31/24. Tormentas. La lluvia inculcará pensamientos catastrofistas y reflotará agravios del pasado. Es el momento para pensar en la venganza.
Lunes: 31/24. Tormentas. Ya no quedará ropa que no esté húmeda. Considere la desnudez.
Martes: 31/24. Tormentas. Ande con cuidado porque la lluvia vuelve todo un posible socavón.
Miércoles: 31/25. Tormentas por la tarde. Otro día que no cambia en nada. Será raro lo igual que le parezca.
Deje por favor un comentario. Aunque sea uno. Gracias.
-P r e v i a m e n t e -
-La peor de todas las consecuencias- dijo el bosque- las sufre el ser humano, y nosotros no podemos hacer nada para ayudarlo.
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Por fin llegó el humano a la reunión del cambio climático.
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-Lo primero que nosotros la humanidad tendremos que hacer es dejar de hacer. Muchas cosas.
¡Qué bonito es esto!